Apoyando a su equipo de proyecto: cómo liderar como Manager de Proyecto No Oficial

Como líder, guiar y apoyar los proyectos es una de las formas más importantes de contribuir al éxito de su equipo. Ya sea que esté orientando a miembros del equipo o ejerciendo un papel no oficial como gestor de proyectos, su participación puede marcar la diferencia. Aunque entender los procesos y factores clave de un proyecto exitoso es útil, los equipos también necesitan un liderazgo colaborativo y cercano para establecer objetivos de forma efectiva.
Muchas veces, el papel más valioso de un líder en un proyecto es actuar como entrenador y motivador. Al tener una visión más clara de cómo funcionan los proyectos saludables, los líderes están mejor preparados para dirigir las tareas del día a día hacia los objetivos marcados. Ser un líder proactivo y que brinda apoyo implica ofrecer ánimo junto con una orientación informada: esto ayuda a mantener el entusiasmo, asegurar que el equipo siga el rumbo correcto o corregir el camino si los resultados no son los esperados o surgen nuevas circunstancias.
Independientemente del objetivo del proyecto, los buenos líderes siempre tienen oportunidades para intervenir y apoyar a las personas que gestionan y ejecutan el trabajo, aunque no estén directamente en su equipo. A continuación, le explicamos algunas formas en las que puede ayudar al éxito de los equipos de proyecto a lo largo del proceso.
Sea un canal de comunicación
La diversidad de perspectivas y experiencias dentro de un equipo de alto rendimiento lo hace fuerte, pero también puede generar malentendidos inevitables. Incluso los equipos más capacitados pueden asumir cosas o interpretar mal la información durante un proyecto. Observar de cerca el desarrollo del proyecto ayuda a prevenir errores de comunicación tanto entre los miembros del equipo como con los responsables externos. Adoptar una política de comunicación constante y verificar supuestos contribuirá a mantener al equipo alineado y a cerrar posibles brechas en la comunicación.
Como líder, puede facilitar una colaboración fluida dentro del equipo y entre distintos equipos creando un ambiente inclusivo y de apoyo, donde las personas se sientan cómodas comunicando los problemas directamente cuando surgen. Establecer espacios dedicados a escuchar y orientar a sus colaboradores reforzará la confianza, la cohesión y le posicionará como aliado, mentor y motivador.
En entornos de trabajo distribuidos, es aún más importante asegurar que el equipo tenga acceso a la tecnología y a estructuras que faciliten una comunicación clara y frecuente. Asegúrese de que los canales de comunicación estén abiertos, funcionen bien y sean fácilmente accesibles. Anime a los miembros del equipo a mantener contacto frecuente con clientes y partes interesadas, para conservar la visibilidad del proyecto y ajustarse rápidamente ante cambios en las necesidades o condiciones.
Comparta documentos clave y actualizaciones del proyecto de manera regular con todos los involucrados, tanto internos como externos. Esto ayudará a identificar y resolver desalineaciones, y refuerce la expectativa de mantener estos chequeos de forma bidireccional a través de canales adecuados.
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Conecte las actividades del proyecto con el valor
Como líder y entrenador, su papel también consiste en ayudar al equipo a entender por qué es valioso el proyecto, y comunicar ese propósito en cada oportunidad. Ayude a los miembros del equipo a relacionar el trabajo que están haciendo con el valor que aporta el proyecto. Según Kogon, “hay que comunicar que el valor del proyecto está en cómo contribuye a los objetivos de su organización. Los líderes deben ser proactivos al analizar los proyectos que se están desarrollando y asegurar que estén alineados con lo que más valor aporta tanto al equipo como a los clientes”.
Transmitir una visión basada en el valor permite al equipo comprender el propósito detrás del proyecto, lo que facilita la generación de soluciones más creativas cuando surgen obstáculos. Esta comunicación centrada en el valor puede manifestarse, por ejemplo, en una simple pregunta durante las reuniones de equipo: “¿Sigue el trabajo alineado con el objetivo del proyecto?”. Estimular este tipo de reflexión aumenta la implicación personal, hace que el trabajo sea más gratificante y favorece el desarrollo auténtico del equipo, ya que cada miembro entiende el impacto de su aportación.
Proteja a sus equipos de proyecto
Si usted actúa como gestor de proyectos no oficial o lidera desde un nivel más estratégico, es fundamental ofrecer un apoyo constante tanto a su equipo como a quienes puedan estar gestionando el proyecto directamente. Proteger a estos profesionales del agotamiento o de la sobrecarga es una habilidad esencial del liderazgo. Según Kogon, “todo el mundo está creando algo, ya sea un sistema, un producto, una campaña de marketing o un programa de formación en liderazgo. Parte de la responsabilidad del líder es reducir los proyectos innecesarios o sin sentido”, especialmente cuando no encajan en la propuesta de valor más amplia de la organización.
Fomentar la colaboración entre miembros del equipo y diferentes departamentos, mantener el enfoque en el valor del negocio y garantizar vías de comunicación abiertas contribuirá a generar un entorno de trabajo saludable. Todo ello aumentará la implicación en los proyectos y ayudará a los equipos a trabajar de forma eficaz para obtener resultados relevantes para su organización.
Dado que las organizaciones modernas están en constante cambio, es habitual que los líderes asuman el rol de gestores de proyecto no oficiales. Fortalezca sus capacidades con una base sólida en gestión de proyectos, un enfoque de coordinación orientado al equipo y herramientas que reduzcan obstáculos.